Reino
Tres
semillas
“Y con muchas parábolas semejantes les enseñaba Jesús la
palabra hasta donde podían entender. No decía nada sin emplear parábolas. Pero
cuando estaba a solas con sus discípulos, les explicaba todo.” Marcos 4.33-34
NVI
Primera semilla: El milagro del
vago
“Jesús continuó: «El reino de Dios se parece a quien
esparce semilla en la tierra. Sin que este sepa cómo, y ya sea que duerma o
esté despierto, día y noche brota y crece la semilla. La tierra da fruto por sí
sola; primero el tallo, luego la espiga y después el grano lleno en la espiga.
Tan pronto como el grano está maduro, se mete la hoz, pues ha llegado el tiempo
de la cosecha».” Marcos 4.26-29 NVI
Segunda semilla: “Poderoso el
chiquitín”
“También dijo: «¿Con qué vamos a comparar el reino de
Dios? ¿Qué parábola podemos usar para describirlo? Es como una semilla de
mostaza: cuando se siembra en la tierra, es la semilla más pequeña que hay,
pero una vez sembrada crece hasta convertirse en la más grande de las
hortalizas, y echa ramas tan grandes que las aves pueden anidar bajo su
sombra».” Marcos 4.30-32 NVI
Tercera semilla: Vos
“Otros son como lo sembrado en buen terreno: oyen la
palabra, la aceptan y producen una cosecha que rinde treinta, sesenta y hasta
cien veces más.” Marcos 4.20 NVI